¿Periodista hincha o hincha periodista?


El viernes pasado presencié un espectáculo deprimente. Un narrador deportivo gritándole eufórico a los jugadores de la selección argentina de Básquet, porque iban ganando.


El narrador se alejaba del micrófono por largos segundos y se escuchaba en segundo plano su voz, gritando "Bestia!", "Sos una bestia!", como arenga a los jugadores de la selección que apoyaba.


Capaz a nadie le choque eso, sin embargo yo no puedo dejar de penar que estos tipos están trabajando. 


A mi me encanta la gente apasionada y me encanta ser hincha viendo los partidos. Lo encuentro liberador. Sin embargo ni siquiera sigo los partidos del club al que hincho por su "circuito oficial", ni veo los partidos de la selección en medios venezolanos. Me aburre lo empalagoso de los relatos y el nacionalismo excesivo, que lamentablemente en la venezuela post-chávez es asquerosamente inevitable.


Sin embargo no entiendo por qué cada vez hay más exabruptos en los relatos deportivos.

Entiendo también que cada relator quiere ser "único" y darle su sello personal a la narración, pero la cuestión es ¿a dónde va a parar todo esto? ¿Cuántos más exabruptos vamos a presenciar antes de que comience un poco de mesura?

En mi opinión yo no quiero ver/escuchar a "un hincha", al menos no a alguien que se defina primero como hincha, luego como profesional. Porque precisamente ese es el meollo del asunto: Estás realizando un trabajo, y cuando alguien te paga para que cumplas un trabajo significa que tienes responsabilidades profesionales, no estás ahí sólo para tu disfrute personal.


Entradas populares de este blog